Steve Jobs
(Steve Paul Jobs; San Francisco, 1955 - Palo Alto, California, 2011) Informático y empresario estadounidense. Padre del primer ordenador personal y fundador de Apple Computer, probablemente la empresa más innovadora del sector, este mago de la informática fue uno de los más influyentes de la vertiginosa escalada tecnológica en que aún vive el mundo actual, contribuyendo decisivamente a la popularización de la informática. Sus ideas visionarias en el campo de los ordenadores personales, la música digital o la telefonía móvil revolucionaron los mercados y los hábitos de millones de personas durante más de tres décadas.
Sus padres, dos estudiantes universitarios sin medios materiales para mantenerlo, entregaron al pequeño Steve en adopción al matrimonio formado por Paul y Clara Jobs (maquinista ferroviario y ama de casa, respectivamente). Desde 1961, la familia Jobs residió en la pequeña ciudad californiana de Mountain View, importante centro de la industria electrónica estadounidense. No cabe duda de que el ambiente local influyó en sus futuras inclinaciones profesionales; con apenas doce años se unió al Hewlett-Packard Explorer Club, asociación juvenil en la que los ingenieros de la compañía Hewlett-Packard enseñaban a niños y jóvenes las últimas creaciones en el terreno de la computación.
Al terminar el bachiller en el Instituto Homestead de Mountain View, Steve Jobs ingresó en la Reed College, una universidad de artes liberales radicada en Portland (Oregón), pero abandonó los estudios universitarios un semestre más tarde. En esa época coqueteó con las drogas y se interesó por la filosofía y la contracultura, llegando a viajar a la India en busca de iluminación espiritual. Tras unas prácticas en la empresa Hewlett-Packard en Palo Alto, en 1974 Jobs fue contratado como diseñador por Atari, compañía pionera de la por entonces naciente industria de los videojuegos.
En aquella misma época se unió al que sería su primer socio, el ingeniero Stephen Wozniak. Jobs supo apreciar de inmediato el interés comercial del proyecto de microcomputador doméstico en que trabajaba su amigo; entre los bártulos y enseres domésticos del garaje crearon primero una imaginativa placa base y luego un computador completo, el Apple I, considerado el primer ordenador personal de la historia.
Las novedosas prestaciones del iPhone fueron pronto imitadas, pero sólo otro gran gigante del sector, Google (Sergei Brin y Larry Page), presentó batalla al liderazgo de Apple lanzando ese mismo año Android, un sistema operativo para móviles. La historia se repetía: el iPhone llevaba integrado su propio sistema operativo, el iOS, y gracias al desarrollo de Android, que acabaría por imponerse casi como estándar entre los restantes fabricantes, Google logró evitar que una probable hegemonía de Apple amenazase su posición dominante en Internet, pues era sabido que, en un futuro muy próximo, la mayor parte de conexiones a Internet se efectuarían desde dispositivos móviles.
En 2009, año en que hubo de someterse a un trasplante de hígado, Steve Jobs delegó la mayor parte de sus responsabilidades en Timothy Cook. Pero ni siquiera el visible deterioro de su salud lograría reducir su entrega al trabajo y su afán innovador. Con su creatividad intacta, todavía en 2010 sorprendió al mundo con el iPad, un híbrido de tableta y teléfono móvil; una ligera y delgadísima pantalla táctil de 9,7 pulgadas contenía en su parte posterior la potencia de procesamiento y todas las prestaciones de un ordenador portátil, sin necesidad de teclado ni ratón. Steve Jobs presentó la segunda versión, el iPad 2, en marzo de 2011, en la que sería una de sus últimas apariciones en público. El 5 de octubre de 2011, a los 56 años de edad, falleció en su casa de Palo Alto, víctima del avance del cáncer que le había sido detectado en 2003.
Sus padres, dos estudiantes universitarios sin medios materiales para mantenerlo, entregaron al pequeño Steve en adopción al matrimonio formado por Paul y Clara Jobs (maquinista ferroviario y ama de casa, respectivamente). Desde 1961, la familia Jobs residió en la pequeña ciudad californiana de Mountain View, importante centro de la industria electrónica estadounidense. No cabe duda de que el ambiente local influyó en sus futuras inclinaciones profesionales; con apenas doce años se unió al Hewlett-Packard Explorer Club, asociación juvenil en la que los ingenieros de la compañía Hewlett-Packard enseñaban a niños y jóvenes las últimas creaciones en el terreno de la computación.
Al terminar el bachiller en el Instituto Homestead de Mountain View, Steve Jobs ingresó en la Reed College, una universidad de artes liberales radicada en Portland (Oregón), pero abandonó los estudios universitarios un semestre más tarde. En esa época coqueteó con las drogas y se interesó por la filosofía y la contracultura, llegando a viajar a la India en busca de iluminación espiritual. Tras unas prácticas en la empresa Hewlett-Packard en Palo Alto, en 1974 Jobs fue contratado como diseñador por Atari, compañía pionera de la por entonces naciente industria de los videojuegos.
En aquella misma época se unió al que sería su primer socio, el ingeniero Stephen Wozniak. Jobs supo apreciar de inmediato el interés comercial del proyecto de microcomputador doméstico en que trabajaba su amigo; entre los bártulos y enseres domésticos del garaje crearon primero una imaginativa placa base y luego un computador completo, el Apple I, considerado el primer ordenador personal de la historia.
Las novedosas prestaciones del iPhone fueron pronto imitadas, pero sólo otro gran gigante del sector, Google (Sergei Brin y Larry Page), presentó batalla al liderazgo de Apple lanzando ese mismo año Android, un sistema operativo para móviles. La historia se repetía: el iPhone llevaba integrado su propio sistema operativo, el iOS, y gracias al desarrollo de Android, que acabaría por imponerse casi como estándar entre los restantes fabricantes, Google logró evitar que una probable hegemonía de Apple amenazase su posición dominante en Internet, pues era sabido que, en un futuro muy próximo, la mayor parte de conexiones a Internet se efectuarían desde dispositivos móviles.
En 2009, año en que hubo de someterse a un trasplante de hígado, Steve Jobs delegó la mayor parte de sus responsabilidades en Timothy Cook. Pero ni siquiera el visible deterioro de su salud lograría reducir su entrega al trabajo y su afán innovador. Con su creatividad intacta, todavía en 2010 sorprendió al mundo con el iPad, un híbrido de tableta y teléfono móvil; una ligera y delgadísima pantalla táctil de 9,7 pulgadas contenía en su parte posterior la potencia de procesamiento y todas las prestaciones de un ordenador portátil, sin necesidad de teclado ni ratón. Steve Jobs presentó la segunda versión, el iPad 2, en marzo de 2011, en la que sería una de sus últimas apariciones en público. El 5 de octubre de 2011, a los 56 años de edad, falleció en su casa de Palo Alto, víctima del avance del cáncer que le había sido detectado en 2003.
MUY BUENA INFORMACION
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